Categories: Extraños (Blog)

Sobrevivir, no obstante

El sol esparcía sus rayos con menos intensidad cuando llegaba la hora. Si bien, estaba decidida. Tendría su casa, su trabajo, su familia, su entorno. Quizás traería hijos al mundo. No había un lugar más hermoso para nacer ni para morir. Era casi una ciudad, y su eco.

Por dibujar, trazaba hasta los restos de una iglesia y la fuente sagrada, y verbalizaba conversaciones a futuro, difuminándolas y anotándolas.

Así sobrevivía a las náuseas, que le desaparecían; y no escuchaba ninguna voz, sospechas o tiranías. La mujer de abajo no le faltaba el respeto en su estudio ni fuera del mismo. La macetita tampoco se le movía sola, y el perro no era un escarabajo gigante, sentado junto a un par de críos mutilados vestidos de negro sobre una alfombra de rocas y arena oscura.

La esposa de su tío pronto le llevaría otro té, no obstante.

Pedro Belmonte Tortosa

Share
Published by
Pedro Belmonte Tortosa
Tags: críos mutiladosescarabajo gigantemujer de abajo

Recent Posts

El resto puede esperar

No quería ni mirarle, siempre hermosa y con los dedos largos y las venas marcadas. La niña que fue. Hasta…

14 horas ago

Un libro que creía olvidado

En Villaciruela estaba prohibido leer, escribir. Las señoras habían de serlo siempre, admirables en cualquier circunstancia. Afortunadamente siempre existía otro…

5 días ago

Castigo de Dios y de los hombres en la tierra

Por muy diferentes o parecidas que sean, y cosas hirientes que se digan, las religiones unen a las personas. No…

6 días ago

Si naciste para martillo…

...del cielo te caen los clavos.

1 semana ago

En tiempos fue…

...como llamar a una cabina de teléfono.

3 semanas ago

Por un hijo suyo

Mientras las gentes del lugar afrontaban sus problemas, otras tomaban conciencia del dolor con una honestidad entrañable. Uno de cada…

3 semanas ago