Resulta interesante la mirada de un narrador español sobre el destino humano en nuestro continente latinoamericano. Se constituye como una voz narradora, que crece en un nuevo sujeto en consonancia con la herencia histórica, política y social contemporánea. En La Galicia Mexicana asistimos a una narrativa del dolor y de la existencia que roza el espejismo de la historia de un México siempre lacerante como una manera única de poner en perspectiva el imaginario cultural latinoamericano.
Bruma Grupo Editor
El autor agradece esa vida e identidad,
una vuelta de tuerca más.
No quería ni mirarle, siempre hermosa y con los dedos largos y las venas marcadas. La niña que fue. Hasta…
En Villaciruela estaba prohibido leer, escribir. Las señoras habían de serlo siempre, admirables en cualquier circunstancia. Afortunadamente siempre existía otro…
Por muy diferentes o parecidas que sean, y cosas hirientes que se digan, las religiones unen a las personas. No…
Mientras las gentes del lugar afrontaban sus problemas, otras tomaban conciencia del dolor con una honestidad entrañable. Uno de cada…